Los escándalos de la dirigencia del fútbol colombiano

Ramón Jesurún, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol. Foto: Antena2

Por Sandro Kocsis

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) descubrió un acuerdo ilegal entre la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), Ticket Ya y Ticketshop, mediante el cual planearon y llevaron a cabo un sistema que limitó la libre competencia para favorecer a Ticketshop en la adjudicación del contrato de boletería para las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018.

Con esta artimaña, la FCF y Ticket Ya desviaron masivamente la boletería a Ticketshop con fines de reventa a sobreprecios de hasta el 350% en los partidos que la Selección Colombia debía disputar de local contra Perú, Argentina, Ecuador, Venezuela, Uruguay, Chile, Bolivia y Brasil. Así las cosas, una entrada al encuentro contra Brasil que estaba tasada en 60 mil pesos, se vendió en 270 mil (un aumento del 350%), de modo que, con la explotación vil de la pasión por el equipo nacional, la diferencia fuera repartida entre las tres empresas.

Por las suspicacias que generó todo este proceso, la Superintendencia de Industria y Comercio inició una investigación que concluyó, al menos en este despacho, con una sanción de 18 mil millones de pesos al denominado “cartel de la boletería” que deben pagar 17 personas naturales y tres agentes de mercado por haber facilitado la conducta anticompetitiva. Uno de los implicados es el actual presidente de la FCF, Ramón Jesurún, quien, junto con sus cómplices, posiblemente deberá responder por sus actuaciones ante la Fiscalía General de la Nación, ente que tiene como misión determinar si hubo actuaciones punibles. Vale anotar que la investigación contó con la delación de Ticketshop, organización que confesó su participación y aportó información valiosa para desarticular el cartel.

Así se gestó el entramado corrupto

El entramado corrupto se gestó durante varios actos de una pieza teatral, separados por una oscura serie de favorecimientos, como lo informó la Superintendencia de Industria y Comercio, el 6 de julio de 2020.

Primer acto: los cartelistas determinaron un valor específico para el anticipo (10 mil millones de pesos) contenido en la propuesta de Ticketshop, de manera que esta organización fuera la ganadora. Al momento de la elección, por supuesto, fue considerada la mejor opción, justamente porque “incluyó en su oferta una modalidad de pago por anticipado”.

Segundo acto: el favorecimiento consistió en amañar la presentación de las ofertas, lo cual ocurrió el 12 de agosto de 2015. En efecto, ese día los cartelistas tuvieron información confidencial para conocer en tiempo real cada una de las propuestas registradas ante la Federación Colombiana de Fútbol, con el objetivo de coordinar el valor de la de Ticketshop, empresa que, con ese acervo de datos a la mano, incrementó el valor de su promesa económica a $40.124.640.000, pues con esa cifra la licitación salía a su favor. Esto sucedió minutos antes de vencer el plazo de las ofertas, pero no todo salió como esperaban: la firma de abogados evaluadora del proceso cometió el error de ubicar la propuesta de Ticketshop en el segundo puesto.

Tercer acto: aun así, el Comité Ejecutivo de la Federación Colombiana de Fútbol orquestó una estrategia conducente a garantizar el favorecimiento ilícito, la cual consistió en elegir por unanimidad -sin ningún reparo o deliberación- la propuesta de Ticketshop. De esta forma, quería dar apariencia de legalidad, bajo el supuesto de que no se despertaría ninguna sospecha.

Lo que sucedió después los resumen la Superintendencia de Industria y Comercio, así: "una vez los cartelistas aseguraron la adjudicación del contrato de boletería, TICKETSHOP y TICKET YA suscribieron un contrato de cuentas en participación con el propósito de ocultar la dinámica ilegal que implementaron para el desvío masivo de boletería. Bajo ese ropaje, TICKETSHOP desvió masivamente la boletería a TICKET YA en los partidos de las eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018 que la Selección Colombia disputó en condición de local contra Perú, Argentina, Ecuador, Venezuela, Uruguay, Chile, Bolivia y Brasil”.

Cuarto acto: como era de esperarse, Ticket Ya revendió la boletería a precios muy superiores a los establecidos por la FCF, como el caso del partido contra Brasil como ya se dijo párrafos arriba. Además, los cartelistas produjeron varias acciones para permitir el funcionamiento del sistema anticompetitivo. Por ejemplo, la FCF omitió realizar una auditoría, pese a las quejas de las otras empresas durante la ejecución del contrato de boletería, en tanto que Ticketshop manifestó, en su página web, la presencia de información falsa y publicidad engañosa respecto a la existencia de boletería disponible para la venta al público.

Estas acciones para ocultar el favorecimiento despertaron tantas sospechas, que los mismos cartelistas después la catalogaron como un “acto de infinita torpeza” que, a la postre, desveló su conducta ilegal.

Denuncian chat privado en el que supuestamente se amañan partidos

La Comisión Disciplinaria del campeonato profesional colombiano quitó el punto al Once Caldas de Manizales y dio ganador al Deportivo Pereira con los tres puntos, luego de que comprobara que el jugador Elvis Mosquera, lateral izquierdo del Once fuera alienado en el partido disputado el 6 de octubre pasado, pese a que no podía hacerlo por acumulación de cinco tarjetas amarillas, como lo establece el reglamento.

Este procedimiento ha generado sospechas de amaño de partidos entre los dirigentes, acción que, al parecer, se planifica desde un chat privado para favorecer a uno u otro equipo de la liga profesional colombiano.

Le puede interesar: Pimentel denuncia en Blue Radio chat privado para amañar partidos.